I started out in search of ordinary things...

I started out in search of ordinary things...

martes, 19 de diciembre de 2017

Discos del 2017 (IX)

15. Feist.  Pleasure.


Imagen relacionada

"Sabes que dejaría cualquier fiesta por ti", canta Leslie Feist en Any party, y la canción termina con un portazo y un coche pasando en el que se oye Pleasure, la canción que abre el disco, que da nombre a éste y es la más animada.
Y a continuación comienza, tranquila, quieta, la bellísima A man is not his song; como si Feist la estuviese cantando en el salón de casa, solo para ti, a la guitarra. Y tú caes rendido, porque por una voz así también dejarías cualquier fiesta, solo por escucharla; y cuando te tiene enamorado, la canción se rompe con ese sample de rock duro de Mastodon que no vine a cuento y revienta la velada. Estos cinco minutos definen a la perfección lo que es Pleasure, el cuarto disco de Feist -el primero en seis años-. La fiesta se ha acabado, y nuestra reina del indy no está por la labor de recuperar su trono; no más canciones en anuncios de colonia de Don Algodón ni de Apple, no más canciones con los Teleñecos. Quienes buscábamos refugiarnos en la calidez de temas como Mushaboom  y 1234, o encontrar hits directos de la talla de I fell it all nos sentiremos huérfanos ante esta Feist madura, que por momentos parece ocultar sus cualidades vocales en una producción seca, arisca. Pero no desesperemos ante las primeras escuchas, porque la llama sigue ahí, -da una luz menos brillante que antes, pero quizás más intensa-, y con canciones como I wish I didn't miss you, Any party, A man is not his song  y Baby be simple tenemos suficiente para iluminarnos y calentarnos en estos días de oscuridad.
Pincha aquí para ver vídeo

14. Meursault. I will kill again.

Resultado de imagen de meursault i will kill again

Escuchamos música para emocionarnos, y al plantearme hacer esta lista la primera premisa fue ser honesto. Así que este disco desconocido de un pequeño grupo escocés del que supongo que no habrás oído hablar, este disco cuyas cualidades musicales seguramente están por debajo del de muchos otros, este disco ocupa un lugar preferente en esta lista. Porque -tras el instrumental para entrar en situación ...- la triada con la que empieza  Ellis be dammed, The Mill y Ode to Gremlin ya me deja la piel de gallina cada vez que la escucho; Klopfgeist y su electrónica fantasmagórica es lo más cerca a The Antlers que he sentido en años; Oh, Sarah es un canto de taberna de borrachos enamorados; Belle Amie te mantiene el nudo en la garganta hasta que rompe; Gone, etc... y ese piano que se mantiene en el aire entre interferencias; I will kill again son Migala en su primer disco; y A walk in the park cierra el disco como si todo lo anterior no hubiese sido más que un sueño. 
Pincha aquí para ver vídeo

13. Peter Silberman. Impermanence. 

Imagen relacionada

Hablamos de emoción y nos damos de bruces con Impermanence de Peter Silberman. El líder de The Antlers nos entrega su primer disco en solitario, fruto de su reclusión recuperándose de una enfermedad que le produjo una temporal pérdida de audición e hipersensibilidad al ruido que le impidió hablar y cantar durante un tiempo. Por eso no es casualidad que el protagonista absoluto de este disco sea el silencio; un silencio que se apodera de cada espacio que ocupa cada canción, y que la guitarra o la voz rompen con un respeto casi sepulcral. Un tratamiento así del silencio y de congelar el tiempo en una canción solo lo he visto hacer a Low en la época del Secret name. Son sólo seis canciones, sólo 36 minutos, y debemos estar agradecidos porque dejarnos sin aire más tiempo podría provocarnos problemas de salud. Estamos hablando de la persona detrás de los discos de The Antlers -Hospice, Burst apart y Familiars-; aquí se basta y se sobra con su voz y la guitarra para buscar la catarsis.

Pincha aquí para ver vídeo

12. Hurray for the Riff Raff. The Navigator. 

Resultado de imagen de hurray for the riff raff the navigator

Este disco es una historia, un viaje desde Puerto Rico a Nueva York en busca de un futuro supuestamente mejor; pero también es un viaje interior, un reconocimiento de quien se es, de orgullo de raíces y orgullo de mujer, que alcanza su climax tanto narrativo como musical en Pa'lante, esa canción río que va creciendo desde la autoconciencia personal -"Be/Do something"- hasta la autoconciencia del colectivo emigrante que merece un futuro por el que ha luchado -desgarradora parte final con el recitado de los nombres de aquellos que se han quedado atrás-. Por el camino, hasta llegar hasta aquí nos encontramos a Lou Reed y a David Bowie, ritmos caribeños y  gospel de Nueva Orleans conviviendo juntos en uno de los discos del año. Un trabajo ambicioso que cumple sobradamente con las expectativas. 
Pincha aquí para ver vídeo

11. Sean Rowe. New Lore.





















A la portentosa voz de barítono de Sean Rowe le acompaña en esta ocasión una esmerada producción que aporta a cada tema lo que necesita -coros gospel, cuerdas, pianos o una simple guitarra, según lo que pida cada canción- que eleva de manera considerable el nivel del disco. Pero, especialmente, en este disco, a la ya emocionante de por sí voz de Sean Rowe y a su revisión del folk, soul y americana le acompaña un nivel de inspiración en la composición que hace que este sea de largo su mejor disco. Gas Station Rose y esa guitarra acústica que rompe en cuerdas y piano al final; The Salmon y esos coros marcados con el piano que fluyen a lo largo de la canción; el gospel de Promise of you; esa oda honesta y desnuda a descubrir ser padre que es I'll follow your trail -con esos coros hechos por Sean que ponen la piel de gallina-; la tensa calma hasta romper en estribillo de The Vine; el soul juguetón de Newton's Cradle, el baladón a piano marca Leonard Cohen que es I can't make a living from holding you; el baladón country marca Kenny Rogers que es It`s not hard to say goodbye; el soul más experimental que es You keep coming alive; y esas dos maravillas folk que cierran el disco The very first snow y To leave something behind. Alta carga emocional, música de calidad. Irreprochable.
Pincha aquí para ver vídeo

No hay comentarios:

Publicar un comentario